Errores de mantenimiento de tu coche que te pueden salir caros (I)

Presta mucha atención, porque estos errores pueden acabar en avería grave.

Siempre te recomendamos que mantengas correctamente tu coche y no, no nos cansaremos nunca de recordártelo. Es la mejor manera que tienes de lograr que su vida útil se alargue y que su rendimiento sea óptimo. Ahorro de combustible, protección del motor, reducción de emisiones… la lista de ventajas es muy larga. Una de las más importantes es evitar averías graves que desemboquen en facturas de taller astronómicas. Unos problemas que pueden provocar los errores de mantenimiento.

De hecho, no prestar la suficiente atención al mantenimiento de tu vehículo te puede salir muy caro. A continuación, echa un vistazo a los errores más comunes en el cuidado del coche que pueden desembocar en una avería y que hemos recopilado para ti.

La correa de distribución

Su sola mención suele provocar sudores fríos porque, si se rompe, reparar el motor te costará tanto que tal vez te plantees cambiar de coche. En efecto, se trata de una de las piezas vitales para su funcionamiento y, por ello, se debe prestar una atención minuciosa a su mantenimiento.

En función del vehículo, su uso y el ambiente en el que se mueve, se aconseja cambiar este elemento entre los 80.000 y 120.000 km o cada cinco años. Es muy importante hacerlo, así que no caigas en la tentación de retrasar esta operación.

Repostar gasolina en un coche diésel

Estos errores son más habituales de lo que crees, equivocarse de manguera o surtidor y repostar el combustible equivocado. Si te ocurre y te das cuenta antes de ponerte en marcha, estás de suerte: todavía puedes evitar que el error se convierta en una avería grave. No enciendas el motor y llama a una grúa para que lleve el coche a un taller.

Piensa que, si solo tiene que realizar un vaciado y limpieza, solucionarlo te puede salir por 200 euros. Si, por el contrario, no te has dado cuenta a tiempo, puedes llegar a pagar hasta 2.500 euros por un cambio de camisas, pistones, bielas y un largo etcétera de piezas.

Agua en el depósito del combustible

Este problema es menos frecuente, pero, si ocurre, lo mejor es resolverlo de manera inmediata. Puede ocurrir si no has cerrado bien la tapa superior de combustible, que esta esté bloqueada o estropeada o que entrara agua en el último repostaje por alguna razón. En cualquier caso, las consecuencias pueden ser nefastas, ya que se puede oxidar el depósito.

Además, este descuido puede provocar daños en el filtro y en el sistema de alimentación del motor, afectar gravemente a los inyectores, romper la bomba inyectora, la culata… Repararlo puede suponer entre los 200 euros del vaciado y limpieza hasta los 3.000 euros por la reparación.

Demasiado aceite en el motor

Normalmente se habla de la falta de aceite en el motor e incluso hay mucha gente que cree que, cuanto más lubricante, mejor. Sin embargo, esto no es así. Un exceso de aceite en el motor puede llevar a que el lubricante salpique a los cilindros y, como consecuencia, a quemar más lubricante de lo normal, pudiendo incluso alcanzar la cámara de combustión.

Si se detecta a tiempo, solucionar este problema es muy sencillo: basta con vaciar el exceso de aceite, con un coste de unos 40 euros. El problema viene si el producto ya ha afectado a piezas claves para el funcionamiento del vehículo, entonces la reparación puede llegar incluso a los 1.500 euros.

Estos son algunos de los errores de mantenimiento que pueden desembocar en una avería grave de tu vehículo. Son fallos bastante comunes y que ya han lamentado muchos conductores antes que tú. Así que te aconsejamos escarmentar en cabeza ajena y prestar siempre atención al cuidado de tu vehículo.

Eso sí, todavía hay más fallos que pueden conducir a un desastre en tu coche y que te contaremos en otro artículo más adelante. Mientras tanto, recuerda que utilizar un aceite de calidad y adecuado a tu vehículo es uno de los mayores aciertos que puedes tener para mantenerlo adecuadamente.