Como decíamos en el episodio 3, si el combustible se mezcla con el aceite provocará una alteración de sus propiedades. Y una de las más importantes es la disminución de su viscosidad. El lubricante, por tanto, será más líquido, y tendrá más dificultades para crear la capa que protege a las piezas del roce entre sí, es decir, de la fricción. Si utilizas un producto de calidad, un buen lubricante en tu motor, te olvidarás de estos problemas. Reducirás muchísimo la posibilidad de sufrir un gripado.

Hidrógeno: los colores del gas incoloro (2)
Verde, rosa o amarillo: así es el hidrógeno que se produce a partir de agua.