Estos productos ayudan a ahorrar y cuidan del motor de tu vehículo.
¿Recuerdas cuando te hablábamos de los aditivos del combustible? Sí, nos referimos a esos productos químicos que se agregan al carburante para mejorar el rendimiento del motor de tu coche.
Entonces te mencionábamos algunos como los que ayudan a mejorar el índice de cetano para conseguir una combustión de buena calidad. En esta ocasión te vamos a hablar de otros tipos de aditivos para combustibles que también benefician el funcionamiento de tu vehículo. Por ejemplo, algunos que se alían con los inyectores o el depósito de carburante para prolongar su vida útil.
Los amigos de los inyectores
¿Sabías que existen aditivos relacionados con la protección y limpieza de los inyectores? Estos productos químicos ayudan a conseguir un mejor funcionamiento del sistema de inyección y también de la bomba de combustible.
Este efecto es especialmente importante en motores con inyección common-rail de alta presión, que pulverizan el combustible a través de los inyectores para mejorar el rendimiento del motor. Es vital que los inyectores funcionen de manera correcta, ya que la pulverización del gasoil debe ser la adecuada y su distribución por la cámara de combustión, homogénea. Así es como se consigue una combustión del carburante óptima.
Si el combustible tiene una calidad baja, se pueden generar depósitos en los inyectores que obstaculizan la dispersión del combustible. En casos extremos, este problema puede llevar al taponado completo del inyector, evitando así la entrada de carburante a la cámara.
Hay que tener en cuenta que los inyectores se pueden ensuciar por varias causas, aunque la mala calidad del carburante es la principal. Las consecuencias más notorias de este problema son la pérdida de potencia del motor, un mayor consumo de combustible y un aumento de las emisiones de gases contaminantes perjudiciales.
Control del sistema de combustible
Los aditivos desemulsionantes son otros grandes aliados que te puedes encontrar en los carburantes de calidad. Están asociados al control del sistema de combustible y se encargan de evitar que se formen bacterias por la presencia de agua en el depósito.
También existen los aditivos inhibidores de la corrosión, que protegen las partes metálicas de este sistema frente a la oxidación y la corrosión, inyectores incluidos. Por último, merece la pena mencionar los aditivos estabilizantes, encargados de mantener el combustible siempre fresco y de evitar la descomposición térmica del gasóleo que puede llegar a producir lodos.
Estos aditivos tienen una misión común: mejorar las distintas funciones del diésel para que el vehículo entregue sus mejores prestaciones. Gracias a ellos aumenta el rendimiento, la limpieza y la eficiencia del motor.
En ocasiones se puede obtener un aditivo para el combustible que cumpla con varias de estas funciones al mismo tiempo. Así se consigue un paquete de aditivación con la máxima cantidad de beneficios en un solo producto.
El tridente mágico del ahorro
A la hora de reducir el consumo de combustible, hay una tercera propiedad de los aditivos que se suma a la de limpieza de los inyectores y la de mejora del índice de cetano. Se trata de la modificación de fricción, que junto a las dos anteriores forma el tridente mágico del ahorro en carburante.
En Total damos fe de ello. De hecho, hemos realizado pruebas de campo extensivas durante 12 meses y más de un millón y medio de kilómetros recorridos con una empresa de transporte público urbano para probar el efecto de los modificadores de fricción en los aditivos. El resultado fue un consumo de combustible el 2,4% menor respecto al habitual de la flota. Estos resultados se alinean con otras pruebas de campo que se han realizado en otros lugares como Marruecos, donde se observó un ahorro del 4% y Canadá (5%).
No hay duda: el uso de aditivos para el combustible puede tener muchos beneficios, en función del uso que se haga del vehículo y las necesidades específicas. Se trata de una opción muy interesante si además se alinea con los distintos lubricantes Fuel Economy de la gama Total, que maximizan el ahorro de combustible y, por tanto, de dinero.
No olvides que, al igual que en el caso de los aceites de motor, utilizar combustibles de calidad es importante para proteger el motor de tu vehículo.