Es una operación esencial para conservar las prestaciones del vehículo. Te lo contamos.
Ahora que ya sabemos para qué sirve el filtro de aire en un vehículo y cuántos tipos diferentes existen, hablemos sobre su mantenimiento. Efectivamente, este elemento requiere nuestra atención periódicamente si queremos evitar contratiempos. ¿Cuáles? Los que verás a continuación.
¿Qué pasa si el filtro de aire está sucio?
El mayor problema relacionado con el filtro de aire es la suciedad, que puede provocar varios efectos negativos en el funcionamiento del vehículo.
Reducción del rendimiento del motor.
Un filtro sucio obstruye el flujo de aire hacia el motor. Esto puede resultar en una disminución de la potencia y del rendimiento general del vehículo.
En estas condiciones, el motor no podrá obtener la cantidad adecuada de aire que requiere para realizar una combustión eficiente, lo que se traducirá en una aceleración más lenta y una menor respuesta del acelerador.
Aumento del consumo de combustible
Cuando el filtro sucio restringe el flujo de aire, el motor necesita quemar más combustible para mantener su funcionamiento. ¿La consecuencia? El consumo del vehículo aumentará y, con él, la frecuencia de tus visitas a la gasolinera.
Mayor emisión de contaminantes
Si el motor funciona de manera ineficiente y la combustión es incompleta por la suciedad del filtro de aire, las emisiones de gases contaminantes del vehículo serán mayores.
Mayor desgaste del motor
Que un filtro pierda eficiencia suele conllevar el paso de partículas que no nos interesan. El filtro de aire no es una excepción. Si no cumple bien su función, es probable que la suciedad y el polvo se abran paso hacia el motor.
Esto es peor de lo que parece porque esas partículas pueden causar un mayor desgaste de componentes como los cilindros o los anillos del pistón. Como consecuencia, la vida útil del motor se reducirá. Eso sí, los pasos por el taller aumentarán.
Problemas de arranque en frío
Un filtro de aire obstruido también puede dificultar el arranque del motor en condiciones de frío. ¿Por qué? Pues porque si el suministro de aire es insuficiente, el motor puede funcionar de manera irregular o incluso no arrancar en absoluto.
Luces de advertencia en el panel de control
Algunos vehículos modernos están equipados con sensores de flujo de aire que pueden detectar restricciones en el filtro de aire. Si el filtro está muy sucio, puede aparecer una luz de advertencia en el tablero.
¿Hay que cambiar el filtro de aire?
La respuesta a esta pregunta es: sí, hay que sustituirlo periódicamente. Además, es muy importante que sepas cuándo hay que cambiar el filtro de aire de tu vehículo para garantizar un buen rendimiento del motor. Hay algunos factores que influyen en la frecuencia con la que hay que hacerlo y otros puntos que debes considerar:
Frecuencia de conducción y ubicación
La frecuencia con la que debes cambiar el filtro de aire depende en gran medida de tus hábitos de conducción y de la ubicación geográfica.
Por ejemplo, si conduces sobre todo por una gran ciudad, donde la contaminación y la suciedad del aire son más frecuentes, es probable que necesites cambiar el filtro con mayor regularidad. Lo mismo ocurrirá si sueles conducir por lugares con mucho polvo.
Inspección visual
Es muy recomendable realizar una inspección visual del filtro de aire al menos una vez al año. Solo tienes que retirar el filtro para observar su color y estado.
Si notas que el filtro está oscurecido o contiene una acumulación significativa de polvo, suciedad o insectos, esto es una señal clara de que ya toca reemplazarlo.
Kilometraje recomendado
Si no tienes un patrón de conducción específico o simplemente te interesa seguir un programa de mantenimiento general, lo aconsejable es cambiar el filtro de aire cada 15.000 a 20.000 kilómetros, que es lo que suelen recomendar los fabricantes.
Mantenimiento del filtro de aire
Como hemos visto hasta ahora, el mantenimiento adecuado del filtro de aire es esencial para garantizar que el motor funcione de manera eficiente y que se mantenga el rendimiento del vehículo. Se puede hacer siguiendo estos pasos:
1) Comprobar si pasa luz a través del filtro de aire.
2) Si no es así, habrá que sacudirlo con cuidado para desprender las partículas superficiales.
3) Para una limpieza más exhaustiva habrá que extraerlo del vano motor.
4) Insuflar aire con un soplador. Esto hay que hacerlo desde la parte contraria a la que el filtro recibe el aire dentro del motor.
5) Sacudir una última vez y limpiar la caja de alojamiento del filtro.
6) Montar de nuevo.
7) Si el filtro de aire siguiera sucio, es mejor sustituirlo por uno nuevo.
Beneficios de un buen mantenimiento del filtro de aire
Si el filtro de aire está sucio e impide el paso adecuado del aire, es muy probable que se note durante la conducción. Por ejemplo, en una pérdida de potencia. Si no se soluciona, pueden aparecer averías en otras partes del motor.
Por el contrario, mantener el filtro de aire en buen estado aporta varios beneficios:
– Flujo de aire correcto.
– Suministro de aire adecuado.
– Calidad de aire mejorada en un 99%.
– Mayor resistencia a las altas temperaturas.
– Menor riesgo de averías.
¿A que merece la pena prestarle atención al filtro de aire? Igual que ocurre con otros filtros como el del aceite o el del combustible, mantenerlo adecuadamente ayudará a que el motor mantenga sus prestaciones durante más tiempo, ahorrará averías y gasto en carburante, entre otras cuestiones. Definitivamente, retrasar su sustitución no sale a cuenta.