biolubricantes

Biolubricantes: ventajas, desventajas y aplicaciones

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (4 votos, promedio: 5,00 de 5)
Cargando...
Comparte en redes sociales:

Los biolubricantes que cuidan su relación con el medioambiente son cada vez más populares. Te contamos por qué. 

¿Te acuerdas de los biolubricantes? Te hablábamos de ellos en un post anterior, son esos aceites que son rápidamente biodegradables y tienen una toxicidad reducida. Hoy te vamos a hablar con un poco más de detalle sobre estos lubricantes, que ganan cada vez más importancia y presencia en el mercado por sus ventajas en el respeto por el medioambiente. Esto significa que cada vez están presentes en un mayor número de herramientas, sobre todo las que se suelen utilizar en entornos naturales. 

En realidad, se conocen como biolubricantes a todos aquellos productos que son rápidamente biodegradables y, al mismo tiempo, no resultan tóxicos para seres humanos y medios acuáticos —según criterios específicos—. Esto es muy importante, por ejemplo, en el caso de que se produzca un vertido accidental, ya que se reducen los riesgos para el medioambiente. Estos lubricantes contienen, entre otros ingredientes, aceites vegetales y ésteres sintéticos. 

Ventajas (y desventajas) de los biolubricantes 

Los biolubricantes presentan una serie de ventajas respecto a sus homólogos minerales, aunque también pueden tener ciertas desventajas que conviene conocer. 

Entre las ventajas destacan las siguientes: 

– Evitan la contaminación del entorno por fugas o descargas: esto se debe a sus propiedades biodegradables, que comentábamos anteriormente. Por el contrario, los productos derivados del petróleo pueden contaminar el agua subterránea y pequeñas cantidades de aceites minerales pueden tanto impedir el crecimiento de las plantas como resultar tóxicas para la vida acuática.  

– Mayor vida útil de las herramientas en el caso de los ésteres: esto se debe a que tienen mayor lubricidad, por lo que producen una menor fricción en las piezas metálicas, incluidas las herramientas de corte y conformado. 

En cuanto a las posibles desventajas, hay que tener en cuenta las siguientes: 

– Mala estabilidad térmica y ante oxidación: aunque, a priori, los biolubricantes parten con esta desventaja respecto a los minerales, lo cierto es que, en general, los aceites vegetales con alto contenido en oleico presentan una estabilidad aceptable para una gama de aplicaciones muy amplia.  

Eso sí, los poliglicoles y los ésteres sintéticos son aún más estables que la mayoría de los aceites vegetales, y son los que más se utilizan en aquellas aplicaciones donde la oxidación es un factor determinante. De hecho, algunos ésteres sintéticos debidamente formulados muestran incluso una estabilidad ante la oxidación superior a la de los lubricantes basados en aceites minerales. 

– Mal comportamiento a baja temperatura: este riesgo puede darse. Sin embargo, el comportamiento a baja temperatura de los fluidos con base vegetal —sobre todo los derivados del aceite de colza— puede ser aceptable para la mayor parte de las aplicaciones. Existen además aditivos como diésteres sintéticos, poliolésteres u oleatos, que se emplean como diluyentes en lubricantes biodegradables, que consiguen reducir en ocasiones el punto de congelación de los aceites vegetales a -24°C.  

¿En qué sectores se aplican los biolubricantes? 

Como los biolubricantes presentan ventajas importantes en cuanto a riesgos medioambientales, se deben utilizar en cualquier aplicación en la que exista alguno de esos riesgos. 

Un ejemplo es la conocida como lubricación a pérdida en cadenas de motosierras. Durante el uso de la herramienta, el aceite se somete a una fuerza centrífuga y se esparce por el suelo. También están indicados para su utilización en motores de dos tiempos o en aquellos usos en los que los lubricantes estén sujetos a posibles vertidos accidentales. Este es el caso de los aceites hidráulicos o aceites de transmisiones y diferenciales que se emplean para optimizar el funcionamiento de equipos como cosechadoras, grúas, o tractores. 

Los biolubricantes también se utilizan en grasas, sobre todo para lubricar piezas de gran tamaño que no pueden cubrirse continuamente con aceite. Este es el caso, por ejemplo, de las cadenas que se emplean en presas e instalaciones de canales —compuertas—.  

El sector de la construcción también sigue siendo una aplicación importante para los lubricantes a base de aceites de origen vegetal, especialmente para el moldeado de hormigón. Los biolubricantes también se pueden utilizar en el campo del mecanizado y trabajo de metales —aceites de corte, piezas de refrigeración o protección contra la corrosión—. 

Como ves, los biolubricantes están presentes cada vez en más lugares y usos. Son, sin duda, la mejor respuesta que existe en la actualidad para evitar problemas al medioambiente durante el uso de distintas máquinas y herramientas. 

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (4 votos, promedio: 5,00 de 5)
Cargando...
Comparte en redes sociales:

1 comentario en “Biolubricantes: ventajas, desventajas y aplicaciones”

  1. Muy clara y concisa la explicación de los Aceites BIOLUBRICANTES. Esta vez si me he enterado.
    Gracias señor por informar y distribuir estos conocimientos. sobre estos aceites .
    De gran ayuda ¡¡¡¡¡
    Notar : Como crítica de mejora , debería ser más extensos estos artículos . Más precisos y profundos . Se quedan a nivel «píldoras», cuando sería más interesante que pudieran extenderse en cuanto a contenido.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.
Los campos necesarios están marcados *.
Le recordamos que Este blog es participativo, aunque TotalEnergies Marketing España se reserva el derecho a la revisión y moderación de los comentarios recibidos en el mismo.Para más información, consultar nuestra sección de normas del blog

Artículos relacionados