Estos automóviles de hidrógeno requieren el uso de lubricantes adecuados a sus características.
¿Recuerdas los H2 ICE? Esos coches de combustión que utilizan hidrógeno y que te presentamos en un post anterior. Hoy seguiremos hablando sobre ellos: conocerás algunas de sus características y ventajas. También te contaremos cómo deben ser los lubricantes para estos coches.
¿Dónde llevan el hidrógeno estos vehículos?
Seguramente ya sabes que los coches de hidrógeno llevan depósitos en los que se almacena este gas. En el caso concreto de los vehículos de combustión que usan hidrógeno, en el año 2000 se habían presentado en Alemania algunos modelos que utilizaban hidrógeno líquido. Lo que ocurre es que, para conservar el hidrógeno en ese estado, hacen faltan temperaturas inferiores a -253ºC. Te podrás imaginar lo difícil que es mantener esas condiciones en un vehículo. Efectivamente, el hidrógeno se acababa evaporando a los pocos días.
¿Qué hacer entonces? Hoy en día, lo más viable consiste en almacenar el hidrógeno como gas a alta presión en un tanque apropiado para ello. En estado gaseoso, el hidrógeno se puede almacenar en un depósito reforzado a una presión de unos 700 bar. Para que te hagas una idea, esa presión es entre 350 y 280 veces mayor que la de los neumáticos de un automóvil —que suele ser de 2 a 2,5 bares—.
¿Qué significa esto? Que los depósitos de almacenamiento de hidrógeno gaseoso en los vehículos son muy especiales y altamente reforzados para que puedan soportar esas enormes presiones de trabajo.
¿Qué ventajas supone un coche de combustión de hidrógeno?
Son varias las ventajas de utilizar hidrógeno en un coche de combustión propulsado mediante un H2 ICE. La principal tiene que ver con sus emisiones contaminantes, que son prácticamente nulas.
Aunque la combustión de hidrógeno es completamente limpia, estos coches utilizan un motor de combustión interna (ICE) por hidrógeno. Esto supone que siempre se van a producir pequeñas emisiones de CO2 y NOx, producidas al quemar algo de aceite y por el nitrógeno que hay en el aire. En cualquier caso, hablamos de un nivel de emisiones muy inferior al de un vehículo con motor de combustión convencional —gasolina o diésel—.
En segundo lugar, estos vehículos pueden utilizar motorizaciones similares a las actuales de gasolina, únicamente con algunas modificaciones constructivas, como te comentábamos en el post anterior. Así que estaríamos utilizando una tecnología ya existente y sobradamente conocida.
Por último, disponer de un vehículo con un H2 ICE que utiliza hidrógeno presurizado nos permite realizar el repostaje en un tiempo muy similar al que tardaríamos en llenar el depósito de un coche convencional. No solo eso: también obtendríamos una autonomía similar.
Lubricantes para coches de combustión de hidrógeno H2 ICE
Es indudable que los coches de combustión e hidrógeno H2 ICE presentan muchas ventajas: un nivel de emisiones muy pequeño, posibilidad de repostar en pocos minutos, una autonomía similar a la de los coches diésel y gasolina actuales… Eso sí, hablamos de vehículos muy especiales. Por lo tanto, los lubricantes que emplean también lo deben ser.
Efectivamente, los coches de combustión de hidrógeno tienen dos características que influyen notablemente en el tipo de lubricante que requieren: las propiedades específicas del hidrógeno y el principal subproducto de su combustión, que es el vapor de agua.
Estas son las principales razones por las que es necesario potenciar ciertas propiedades en los lubricantes de motor de estos coches para que puedan adecuarse a sus motores H2 ICE. El objetivo: asegurar una óptima lubricación y un funcionamiento sin problemas de los propulsores.
¿Y cuáles son las características que debe tener un lubricante para estos coches? Hablamos, fundamentalmente, de tres:
– Extraordinaria estabilidad térmica y a la oxidación: es necesaria por las altas temperaturas que se generan en la combustión del h2.
– Potenciar su comportamiento bajo alta presencia de agua: esto conlleva una mayor protección contra la corrosión, así como una mayor resistencia a la formación de emulsiones y lodos.
– Mayor lubricidad: como el hidrógeno es un combustible seco, el lubricante debe proporcionar una lubricidad adecuada y asegurar el mínimo desgaste del motor.
Sin duda, hablamos de vehículos muy especiales. Por eso los lubricantes que utilizan estos coches deben serlo también. Al igual que ocurre con cualquier coche con propulsión diésel o gasolina, siempre hay que elegir aceites de calidad y adecuados a sus características. Solo así se puede prolongar su vida útil y mantener sus prestaciones durante más tiempo.
3 comentarios en “<strong>Lubricantes para coches de combustión de hidrógeno: así deben ser</strong>”
Bueno pero cual aceite de motor es el indicado y hay a la venta en el comercio
Gracias por su respuesta.
Si hay alguna respuesta les comparto mi investigación para su estudio a los interesados en la combustión de motores a hidrógeno
Gracias
Buenas, incluya la parte de nuestra respuesta para poder seguir la conversación desde el inicio.Gracias
Estaría bien pero lo mismo que gas glp o gnv es los es un de gas o estado gaseoso que es inflable pero produce combustión media el fue sin hacer mucho modificaciones pero ha alta precio es más peligrosos debería ser directo como la corriente continúa medían un sistema de seguridad y autorecargable todo eso ya está falta solo es ensamblar si se animas yo los sacos pido 20 millones de dólares y no saben nada de mi la sacamos ustedes registran su patente y empresa y ha solo que el dinero esa suma y lo sacamos ya está todo por ensamblar y todo está en cuenta regresiva diciembre es la fecha tope no me importa gobierno,Iluminati o cualquier tontería de esas que te matas por ser un científico que va sacar la cura del cáncer para todos avisen ando buscando inversionistas…